Nadie Sabe Nada

Solo os escucho mientras conduzco, así que después de cuatro meses he oído los 80 programas que habéis hecho. Y, efectivamente, me habéis convertido en mejor persona. Pensad que, además, me habéis convertido en un monstruo porque siempre me estoy partiendo de risa mientras CONDUZCO!! Los demás conductores se suelen quejar a la policía: «agente, agente, que me he colado de mala manera en aquella rotonda por delante de aquel tío, no se ha cagado en mis muertos y no para de reírse!!» En fin, os estoy muy agradecido también por otra cosa: como seguramente no sabréis, el cerebro está diseñado para concentrarse sólo en una tarea a la vez. El concentrarme en vuestras maravillosas conversaciones me ha aliviado de mis propios demonios con tanta efectividad, que realmente creo que deberían recetaros como terapia en casos de estrés, angustias y ataques de pánico  : )

Un muy cordial saludo.
Paco.